Hoy en día está en auge el aquí y ahora, el camino fácil, los atajos… Y como no iba a ser menos esto sucede en el ámbito de la alimentación. Realmente una bajada o subida de peso es un proceso que requiere tiempo, es algo que ha de ser progresivo.
Por eso cuando alguien os prometa una transformación exprés desconfiar.
En este artículo vamos a explicar cómo identificar las dietas milagrosas para que no caigas en sus garras. Simplemente deberás responder a 6 sencillas preguntas, y sabrás si estás ante una dieta que te promete mucho pero que no te soluciona nada.
¿Promete resultados demasiado rápidos?
Si una subida o bajada de peso es muy rápida estamos hablando de algo potencialmente perjudicial para la salud. El cuerpo necesita un tiempo de adaptación, no podemos pretender bajar el peso que hemos cogido en los últimos 5 años en 2 meses.
Realizar cambios bruscos de peso corporal lleva a reducir la energía que nuestro cuerpo utiliza, lo que se traduce en que las cantidades de alimentos que deberás ingerir a lo largo del día serán menores.
Además de ralentizar nuestro metabolismo cuando realizamos bajadas muy bruscas de peso, nuestro órganos pueden verse afectados y a largo plazo sufrir enfermedades crónicas.
¿Excluye uno o varios grupos de alimentos?
Un ejemplo claro aquí es la típica «dieta» de la sandía, en la que no hay más alimentos que este y por lo tanto es una dieta desequilibrada con muchas carencias nutricionales.
No existe ningún alimento que contenga todos los nutrientes que necesitamos diariamente, por lo que realizar dietas que excluyen algún grupo de alimentos o que únicamente se centran en un alimento en concreto provoca carencia de vitaminas y minerales.
Otro hándicap de las dietas milagrosas, es la durabilidad. Son dietas que difícilmente vas a poder seguir realizando durante mucho tiempo. Así que, en cuanto dejas de seguirlas, vuelves a recuperar el peso perdido, incluso más del que habías conseguido bajar.
¿Promete resultados fáciles?
Parece que si es fácil vende más, pero cambiar la composición corporal no es pan comido. Eso sí, tampoco es imposible. Simplemente requiere constancia y paciencia.
¿Te dan consejos de vida saludable o se centran únicamente en la dieta?
La gente que defiende este tipo de dietas no anima a la gente a realizar actividad física o dirán que no es necesaria. Es necesarios llevar unos hábitos de vida saludables, que van más allá de realizar una dieta saludable.
¿Te promete que bajaras una cantidad de kilos en determinado tiempo?
Las dietas milagrosas basan su marketing en prometer bajadas de peso, especificando la cantidad de peso y el tiempo que tardaras en perder ese peso. Esto ya es un indicativo de que no se trata de un tratamiento personalizado. Promete que el resultado será igual para todo el mundo, cuando es muy importante concienciarse de que cada persona y cuerpo son distintos, por lo que a priori, no se puede asegurar lo que bajará una persona. Este tipo de publicidad es engañosa.
¿Utilizan testimonios de personas influyentes en los medios de comunicación?
No es extraño ver a famosos y famosas patrocinando productos milagro y dietas de este estilo. Te ponen a una cara bonita para hacerte pensar que podrás tener su cuerpo, porque supuestamente ellos también siguen esa dieta. ¿Aun dudas de que realmente no están usando lo que te intentan vender?
En definitiva, si estáis pensando en seguir una dieta tened en cuenta estas preguntas para que no no os engañen, creando falsas esperanzas y resultados. Pero sobre todo, por salud!
Contactad siempre con profesionales cualificados, para aseguraros una terapia acorde a vosotros y en la que ganéis en salud. Si todavía tienes dudas contacta con nuestros especialistas en nutrición
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